sábado, 21 de diciembre de 2019

MACBETH










Macbeth (título completo en inglésThe Tragedy of MacbethLa tragedia de Macbeth) es una tragedia de William Shakespeare, que se cree que fue representada por primera vez en 1606.2​ Dramatiza los dañinos efectos, físicos y psicológicos, de la ambición política en aquellos que buscan el poder por sí mismo. De todas las obras que Shakespeare escribió durante el reinado de Jacobo I, quien era patrón de la compañía teatral de Shakespeare, Macbeth es la que más claramente reflexiona sobre la relación del dramaturgo con su soberano.3​ Se publicó por primera vez en el Folio de 1623, posiblemente a partir de un prompt book,4​ y es su tragedia más breve.5
No hay seguridad absoluta de que la tragedia sea en su totalidad obra de Shakespeare, ya que algunos afirman que ciertos pasajes podrían ser adiciones posteriores del dramaturgo Thomas Middleton, cuya obra La bruja (The Witch) tiene múltiples afinidades con Macbeth.6
La obra está libremente basada en el relato de la vida de un personaje histórico, Macbeth, quien fue rey de los escoceses entre 1040 y 1057. La fuente principal de Shakespeare para esta tragedia fueron las Crónicas de Holinshed, obra de la que extrajo también los argumentos de sus obras históricas. Raphael Holinshed se basó a su vez en Historia Gentis Scotorum (Historia de los escoceses), obra escrita en latín por el autor escocés Hector Boece e impresa por primera vez en París en 1527. Para agradar a su mecenas, el rey Jacobo V de Escocia, Boece había oscurecido deliberadamente la figura de Macbeth, con el fin de exaltar a un hipotético antepasado del rey, Banquo.
Es importante resaltar que el texto llega a los tiempos modernos únicamente a través del First Folio, a diferencia de otras obras de Shakespeare de las que además se conservan algunas ediciones en "cuartos", aprobadas unas por el autor y otras provenientes de la memoria de los espectadores. Cierta corriente de la crítica sostiene que, dada la extensión menor de esta obra en relación con otras tragedias del Folio, puede argumentarse que lo que ha llegado a nosotros sea un resumen de la obra completa de Shakespeare, justificado además por la existencia de ciertos pasajes oscuros en el texto que dan la impresión de necesitar información adicional para ser interpretados dentro del contexto de la obra.


Sinopsis

Acto I

La obra comienza con tres brujas, las tres "Hermanas Fatídicas" hacen un hechizo en el que se ponen de acuerdo acerca de su próximo encuentro con Macbeth. En la escena siguiente, Duncan, rey de Escocia, comenta con sus oficiales el aplastamiento de la invasión de Escocia por noruegos e irlandeses, acaudillados por el rebelde Macdonwald, en la cual Macbeth, thane (barón) de Glamis y primo del rey, ha tenido un importante papel. Duncan se propone darle en recompensa el título de thane de Cawdor.

Cuando Macbeth y su compañero Banquo cabalgan hacia Forres desde el campo de batalla, se encuentran con las brujas, quienes saludan a Macbeth, primero como thane de Glamis, luego como thane de Cawdor, y por último anunciándole que un día será rey. A Banquo le dicen que sus descendientes serán reyes. Cuando Macbeth pide a las brujas que le aclaren el sentido de las profecías, ellas desaparecen. Se presenta un enviado del rey (Ross), quien notifica a Macbeth la concesión real del título de thane de Cawdor.
And, for an earnest of a greater honor,
He bade me, from him, call thee Thane of Cawdor:In which addition, hail, most worthy thane,
For it is thine.
Viendo cumplida la profecía de las brujas, Macbeth comienza a ambicionar el trono. Macbeth escribe una carta a su esposa, en Inverness, explicando las profecías de las brujas. Lady Macbeth, al leer la carta, concibe el propósito de asesinar al rey Duncan para lograr que su marido llegue a ser rey. De improviso se presenta Macbeth en el castillo, así como la noticia de que Duncan va a pasar allí esa noche. Lady Macbeth le expone sus planes. Macbeth duda, pero su esposa le inculca cizañas, estimulando su ambición.

Acto II

Al llegar la noche, Macbeth, instigado por su esposa, da muerte al rey Duncan cuando duerme en su aposento. Antes de su muerte ve visiones de una espada con sangre y siente fuertes remordimientos, que Lady Macbeth se esfuerza por acallar, y ve lo débil que es su esposo y decide ella incriminar a los criados tiñéndolos de sangre. A la mañana siguiente, se descubre el crimen y Macbeth culpa a los sirvientes de Duncan, a los que previamente ha asesinado, supuestamente en un arrebato de furia para vengar la muerte del rey. Los hijos de Duncan, Malcolm y Donalbain, que se encuentran también en el castillo, no creen la versión de Macbeth, pero disimulan para evitar ser también asesinados. Malcolm huye a Inglaterra y Donalbain, a Irlanda.
Gracias a su parentesco con el fallecido rey Duncan y a la huida de los hijos de este, Macbeth consigue ser proclamado rey de Escocia, cumpliéndose así la segunda profecía de las brujas.

Acto III

A pesar del éxito de sus propósitos, Macbeth continúa intranquilo a causa de la profecía que las brujas hicieron a Banquo, según la cual este sería padre de reyes. Encarga a unos asesinos que acaben con su vida, y la de su hijo, Fleance, cuando lleguen al castillo para participar en un banquete al que Macbeth les ha invitado. Los asesinos matan a Banquo, pero Fleance consigue huir del lugar. En el banquete, poco después de que Macbeth sepa por los asesinos lo ocurrido, se aparece el espectro de Banquo y se sienta en el sitio de Macbeth. Sólo Macbeth puede ver al fantasma, con el que dialoga, y en sus palabras se hace evidente su crimen. Luego banquo mata a su esposa con un hacha enterrada en los pechos

Acto IV


Macbeth regresa al lugar de su encuentro con las brujas. Inquieto, les pregunta por su futuro. Ellas conjuran a tres espíritus. El primero advierte a Macbeth que tenga cuidado con Macduff. El segundo dice que "ningún hombre nacido de mujer" podrá vencer a Macbeth, y el tercero hace una curiosa profecía:
Macbeth seguirá invicto y con ventura
si el gran bosque de Birnam no se mueve
y, subiendo, a luchar con él se atreve
en Dunsinane, allá en la misma altura.
Estas profecías tranquilizan a Macbeth, pero no se queda satisfecho. Quiere saber también si los descendientes de Banquo llegarán a reinar, como las brujas profetizaron. En respuesta a su demanda, se aparecen los fantasmas de ocho reyes y el de Banquo, con un espejo en la mano, indicando así que ocho descendientes de Banquo serían reyes de Escocia. Un vasallo de Macbeth le notifica que Macduff ha desertado. En represalia, Macbeth decide atacar su castillo y acabar con la vida de toda su familia. La acción se traslada a Inglaterra, donde Macduff, ignorante todavía de la suerte que ha corrido su familia, se entrevista con Malcolm, hijo de Duncan, al que intenta convencer para que reclame el trono. Recibe la noticia de la muerte de su familia.

Acto V[editar]


Lady Macbeth empieza a sufrir remordimientos: sonámbula, intenta lavar manchas de sangre imaginarias de sus manos. Malcolm y Macduff, con la ayuda de Inglaterra, invaden Escocia. Macduff, Malcolm y el inglés Siward, conde de Northumberland, atacan el castillo de Dunsinane, con un ejército camuflado con ramas del bosque de Birnam, con lo que se cumple una de las profecías de las brujas: el bosque de Birnam se mueve y ataca Dunsinane. Macbeth recibe la noticia de que el bosque se mueve y de la muerte de su esposa por suicidio. Tras pronunciar un monólogo nihilista, toma la determinación de combatir hasta el final. Tras matar al hijo de Siward, se enfrenta con Macduff. Se siente todavía seguro, a causa de la profecía de las brujas, pero ya era demasiado tarde, debido a que Macduff le revela que su madre había muerto una hora antes de que él naciera, y que los médicos habían realizado una cesárea para mantener a Macduff vivo, y así se cumple la profecía de que «no podría ser matado por ningún hombre nacido de mujer» y Macbeth comprende que las profecías de las brujas han sido engañosas. Acto seguido, Macduff mata a Macbeth y le decapita su cabeza. En la escena final, Malcolm es coronado rey de Escocia. La profecía referente al destino real de los hijos de Banquo era familiar a los contemporáneos de Shakespeare, pues el rey Jacobo I de Inglaterra era considerado descendiente de Banquo.



Temas y motivos recurrentes

  • Ambición y traición. Temas estrechamente relacionados. Macbeth puede verse como una advertencia acerca de los peligros que entraña la ambición. La ambición es el rasgo principal del carácter de Macbeth y de Lady Macbeth, y la causa de su ruina. Aparece por primera vez cuando, a comienzos del acto II, Macbeth asesina a su rey, al que debe lealtad y que acaba además de recompensarle con un título; y se reitera cuando ordena matar a su amigo Banquo, en el acto III. Antes de eso, el tema de la traición había aparecido ya tras la profecía, en el acto III.

  • Visiones y el sentimiento de culpa. A lo largo de la obra, Macbeth y su esposa sufren varias visiones. En la escena primera del segundo acto, poco antes de asesinar a Duncan, Macbeth cree ver un puñal ensangrentado flotando ante sí. Más adelante, en la escena primera del quinto acto, Lady Macbeth, sonámbula, ve en sus manos manchas de sangre que no consigue lavar, imagen con la que se muestran sus remordimientos por su responsabilidad en el asesinato de Duncan. Una tercera visión —aunque no está claro si se trata de una alucinación de Macbeth, atormentado por su conciencia culpable, o de la aparición sobrenatural de un fantasma— es el espectro de Banquo que se presenta en el banquete (acto III, escena IV).


Versiones literarias


HAMLET

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La tragedia de Hamlet, príncipe de Dinamarca (título original en inglés: The Tragedy of Hamlet, Prince of Denmark), o simplemente Hamlet, es una tragedia del dramaturgo inglés William Shakespeare.1​ Su autor probablemente basó Hamlet en dos fuentes: la leyenda de Amleth y una perdida obra isabelina conocida hoy como Ur-Hamlet o Hamlet original (hecho que se deduce de otros textos).
El año concreto en que fue escrita sigue aún en disputa, cuestión que se complica porque se han conservado a la época actual tres versiones tempranas de la obra, conocidas como First Quarto (Q1), Second Quarto (Q2) y el First Folio (F1); cada cual única, puesto que poseen líneas —e incluso escenas— diferentes o ausentes entre ellas. Dichas obras posiblemente fueron compuestas en algún momento entre 1599 y 1601.
Hamlet es la pieza más larga de Shakespeare y una de las más influyentes de la literatura inglesa.




La obra transcurre en Dinamarca, y trata de los acontecimientos posteriores al asesinato del rey Hamlet (padre del príncipe Hamlet), a manos de su hermano Claudio. El fantasma del rey pide a su hijo que se vengue de su asesino.
La obra discurre vívidamente alrededor de la locura (tanto real como fingida), y de la transformación del profundo dolor en desmesurada ira. Además de explorar temas como la traición, la venganza, el incesto y la corrupción moral.

Acto I

La obra comienza en una fría noche en Elsinor, el castillo real de Dinamarca. Un centinela llamado Francisco es relevado por otro hombre llamado Bernardo. Cuando el primero sale, entra otro centinela llamado Marcelo acompañado de Horacio. En sus conversaciones descubrimos que el protagonista de la obra es el príncipe Hamlet de Dinamarca, hijo del fallecido rey. Después de la muerte del rey, su tío Claudio se casa con la esposa del soberano, la reina Gertrudis, madre de Hamlet. También relatan el hecho de que Dinamarca tiene una larga enemistad con Noruega, y una invasión por parte de este último país, liderada por el príncipe Fortimbrás, se espera.
Los centinelas tratan de convencer a Horacio, el mejor amigo de Hamlet, de que han visto al fantasma del rey Hamlet, padre del príncipe. Después de oír a Horacio, el príncipe Hamlet decide ir, por la noche, al lugar de las apariciones para ver al fantasma él mismo.
Polonio es el chambelán del reino; su hijo, Laertes, parte de viaje a Francia y su hija, Ofelia, es cortejada por Hamlet. Laertes le advierte a Ofelia que debe terminar su relación con Hamlet ya que él es el príncipe y no es el dueño de sus deseos porque estos pueden afectar al Estado. A su vez, Polonio, su padre, le prohíbe que lo vea de nuevo, «De ahora para siempre: no quiero, hablando en términos claros, que derroches un solo momento de ocio hablando o conversando con el príncipe Hamlet». Ofelia promete obedecer y dejar de verlo.
Esa noche el fantasma se le aparece a Hamlet y le informa que es el espíritu de su padre y que su tío Claudio lo asesinó al verter veneno en su oído mientras dormía. El fantasma le pide que lo vengue matando a su homicida. Tras el encuentro, el príncipe duda si el espíritu es el de su padre y si lo que ha dicho es real.

Acto II

El rey Claudio y la reina Gertrudis están muy ocupados tratando de abortar la invasión liderada por Fortimbrás, a la vez que se preocupan por el comportamiento errático y cambiante de Hamlet. Claudio decide convocar a dos amigos de Hamlet (Rosencrantz y Guildenstern) para intentar averiguar la causa de la conducta extraña de su sobrino. Hamlet los recibe cortésmente, pero se da cuenta de que lo están espiando.
Ofelia se alarma por el comportamiento extraño de Hamlet y le cuenta a su padre que el príncipe entró a su habitación y se quedó mirándola sin decir nada. Polonio presume que es un “éxtasis de amor” la causa de la locura de Hamlet y pregunta a su hija si había sido dura con él. Ella le responde que había seguido sus órdenes, a lo que Polonio entiende que esa era la causa del trastorno de Hamlet y lamenta haber malinterpretado sus intenciones. Luego informa a los reyes de lo que supone acerca de la "locura" del príncipe.


Hamlet continúa dudando si el fantasma le ha dicho la verdad, por lo que, cuando una compañía de actores itinerantes llega a Elsinor, se le presenta una solución. La obra resulta ser una recreación de un asesinato, por lo que Hamlet les pide que la representen modificada según un texto que él les proporcionaría, para que sea una recreación del asesinato de su padre.

Acto III

Polonio y el rey Claudio deciden espiar a Hamlet cuando este se encuentre con Ofelia pensando que están solos, para ver su reacción y confirmar la causa de su aparente locura. Luego de que Hamlet diga el soliloquio que comienza con la frase ser o no ser, sin advertir la presencia de Ofelia, ella le devuelve unas cartas que Hamlet le envió y el príncipe se pone furioso, la rechaza y le insiste para que se marche a vivir a un convento.2
La corte va a ver la obra y, previamente a la representación, el autor, en la voz de Hamlet, hace una crítica de la sobreactuación de algunos actores. Transcurrida la escenificación, cuando llega el momento del asesinato del rey, Claudio se inquieta y se retira del lugar abruptamente, lo que induce a creer en su culpabilidad.
Claudio temiendo que, en su "locura", Hamlet atente contra él, decide enviarlo a Inglaterra, por su propia seguridad. Mientras tanto, la reina llama a Hamlet para tratar de comprender su conducta tan rara, mientras Polonio se oculta detrás de una cortina para poder espiar y luego contárselo a Claudio.
Hamlet acude al llamado de su madre a la habitación de ella, donde le reprocha su apresurada boda con Claudio, por el inadecuado momento en que ocurrió (menos de dos meses después de la muerte del rey) y por considerar que no existía punto de comparación entre su padre y su tío. Cuando escucha un ruido detrás de la cortina, y pensando que es el rey, lo apuñala, causando la muerte a Polonio. Luego aparece el fantasma de su padre y Hamlet le habla, pero la reina Gertrudis no puede verlo ni oírlo, por lo que supone que el príncipe está totalmente loco. Finalmente Hamlet se lleva el cuerpo de Polonio y lo oculta. Luego parte a Inglaterra, acompañado por Rosencrantz y Guildenstern, ya que tienen la orden de ejecutarlo.

Acto IV

Tras la muerte de Polonio, Ofelia, angustiada además por el alejamiento de su amado Hamlet, comienza a desvariar y cantar; mientras que su hermano Laertes regresa de Francia con la idea de vengar la muerte de su padre. Claudio lo convence de que Hamlet tiene toda la culpa del crimen. En ese momento llega a Horacio una carta de Hamlet en la que cuenta que su barco con rumbo a Inglaterra fue atacado por piratas, por lo que ha retornado a Dinamarca después de ser liberado, mientras sus acompañantes siguen su viaje.
El rey Claudio y Laertes organizan un plan: Laertes peleará contra Hamlet con una espada envenenada para así tener más posibilidades de matarlo. En caso de que falle, Claudio le ofrecerá a Hamlet una copa de vino con veneno. En ese momento llega la reina Gertrudis para informar que Ofelia se ha ahogado en un río, sembrando la duda de que podría haberse suicidado.

Acto V


Después, dos sepultureros cavan una tumba para Ofelia; es mientras discuten cuando llegan Hamlet y Horacio. Uno de los sepultureros encuentra el cráneo de Yorick, un bufón con el que Hamlet solía divertirse cuando era niño, y es allí cuando le habla a la calavera. Luego llega el cortejo fúnebre de Ofelia, encabezado por Laertes, y Hamlet se entera de su muerte. Ambos compiten en quién siente mayor dolor con la pérdida.
En Elsinor, Hamlet se reúne con Horacio y le cuenta cómo encontró una carta de Claudio en la que ordenaba que cuando llegara a Inglaterra, lo mataran, por lo que Hamlet la modificó pidiendo que se dé muerte a Rosencrantz y Guildenstern; en ese momento, un cortesano llamado Osric llega y le informa sobre el duelo con Laertes.
En el duelo, Laertes hiere con su espada envenenada a Hamlet pero el príncipe sigue luchando, luego surge un intercambio casual de espadas y Hamlet termina hiriendo a Laertes con su propia espada envenenada. La reina Gertrudis muere al beber el vino envenenado por error, sin saber que lo estaba.
Laertes, arrepentido, confiesa a Hamlet que la trampa del vino fue ideada por Claudio. Hamlet, encolerizado, por fin logra herir al rey Claudio y le hace beber de su propio veneno, cumpliendo finalmente la venganza que el fantasma de su padre anhelaba. Hamlet, antes de morir, le pide a su fiel amigo Horacio que cuente la verdad sobre lo sucedido y que se declare al príncipe Fortimbrás heredero del trono, el cual se presenta en la sala (después del fallecimiento de Hamlet), en medio del espectáculo de tantas muertes.
La obra termina con la entrada en la corte de Fortimbrás, quien ofrece un funeral militar en honor a Hamlet 

TRAGEDIA

La tragedia es una forma literaria teatral o dramática del lenguaje solemne, cuyos personajes protagónicos son ilustres y se ven enfrentados de manera misteriosa, invencible e inevitable, a causa de un error fatal o condición de carácter (la llamada hamartia) contra un destino fatal (fatumhado o sino) o los dioses, generando un conflicto cuyo final es irremediablemente triste: la destrucción del héroe protagonista, quien muere o enloquece.



Concepto

El término procede de la voz griega tragoedia o “canto del macho cabrío” (τραγῳδία, palabra compuesta de τράγος “carnero” y ᾠδή “canción”) y alude a la canción de los griegos atenienses que era entonada procesionalmente en Honor del dios Dioniso en sus fiestas Dionisias
El género se define como una obra dramática de asunto terrible y desenlace funesto en la que intervienen personajes ilustres o heroicos, y emplea un estilo de lenguaje sublime o solemne. Aristóteles, en su Poética, dejó la primera definición del término:
La tragedia es la imitación de una acción de carácter elevado y completa, dotada de cierta extensión, en un lenguaje agradable, llena de bellezas de una especie particular según sus diversas partes, imitación que ha sido hecha o lo es por personajes en acción y no por medio de una narración, la cual, moviendo a compasión y a temor, obra en el espectador la purificación (catarsispropia de estos estados emotivos […] Necesariamente hay en toda tragedia seis partes constitutivas, según las cuales cada obra trágica posee su cualidad propia; estas partes son la fábula o trama, los caracteres, la elocución, la manera de pensar o ideología, el espectáculo y el canto.
Las tragedias acaban generalmente en la muerte, el exilio o en la destrucción física, moral y económica del personaje principal, quien se enfrenta a un conflicto insoluble que le obliga a cometer un error fatal o hamartia al intentar "hacer lo correcto" en una situación en la que lo correcto simplemente no puede hacerse. El héroe trágico es sacrificado así a esa fuerza que se le impone, y contra la cual se rebela con orgullo insolente o hybris.
También existe un tipo de tragedia de sublimación, en las que el personaje principal es mostrado como un héroe que desafía las adversidades con la fuerza de sus virtudes, ganándose de esta manera la admiración del espectador, como es el caso de Antígona de Sófocles.
La tragedia nació como tal en Grecia con las obras de Tespis y Frínico, y se consolidó con la tríada de los grandes trágicos del clasicismo griego: Esquilo, Sófocles y Eurípides. Las tragedias clásicas se caracterizan, según Aristóteles, por generar una catarsis en el espectador.


Evolución

Tragedia griega]

La tradición atribuye a Tespis la primera composición trágica, pero apenas se conservan restos de sus obras. Después, entre otros autores, destacaron e hicieron evolucionar la tragedia, por orden cronológico, EsquiloSófocles y Eurípides.
Aristóteles en su Poética señala sobre las partes de la tragedia se dividen en prólogoepisodioéxodo y la parte del coro, que se divide a la vez en párodo y estásimo. El prólogo precede al párodo del coro. Después vienen siete episodios entrelazados por cada estásimo para concluir con el éxodo, intervención del coro que no es cantada. En cuanto al estásimo, es un canto de coro sin anapesto ni troqueo.
  • Prólogo: Según Aristóteles es lo que antecede a la entrada del coro. Las características generales son: se da la ubicación temporaria y se une el pasado del héroe con el presente; pueden participar tres actores pero solo hablan dos y el otro está mudo o puede ser un monólogo. Se le informa al espectador el porqué del castigo que va a recibir el héroe y en esta parte no interviene el coro.
  • Párodos: cantos a cargo del coro durante la entrada por el párodo izquierdo presidido por un flautista. En esta parte se realiza un canto lírico, se dan danzas de avance y retroceso; se utiliza el dialecto dórico (más adecuado a los cantos corales debido a su musicalidad).
  • Episodios: pueden ser hasta cinco, hay diálogo entre el coro y los personajes o entre personajes; es la parte más importante por ser la dramática por excelencia y expresa el pensamiento e ideas del personaje. Dentro de los episodios se pueden encontrar los agones, los cuales son pasajes en los que el protagonista se enfrenta dialécticamente con otro personaje.
  • Estásimo: es la parte lírica-dramática donde el autor expresa sus ideas políticas, filosóficas, religiosas, etc.; hay de tres a cinco, es la segunda entrada del coro y en esta parte no danza. Los episodios son siempre separados por los estásimos. Estos mismos pueden estar divididos en estrofas y antiestrofas, las cuales son siempre pronunciadas por el coro, aunque en la festividad griega antigua, las antiestrofas eran dichas por un Corifeo (un representante del coro).
  • Éxodo: es la parte final de la tragedia, hay cantos líricos y dramáticos, el héroe reconoce su error y es castigado (a veces con la muerte) por los dioses, sufriendo el pathos y muchas veces convirtiéndose en el pharmakon (el remedio para el mal). Es aquí donde aparece la enseñanza moral. El éxodo, como los estásimos, siempre lo pronuncia el coro o el Corifeo.1

Tragedia latina

La primera tragedia latina la compuso Livio Anacrónico y se representó en la vieja Roma en el año 514 de su fundación (240 a. C.) en tiempo del consulado de Cayo Claudico Centónfwff y M. Sempiterno, unos ciento sesenta años después de la muerte de Sófocles y Eurípides y doscientos veinte años antes de la de Virgilio. Trasidas de EnnioPacuvio y AccioSéneca compuso ya en la Edad de plata de la literatura latina once que se han conservado e influyeron poderosamente el teatro en lengua vulgar del Renacimiento y el Barroco; destaca en especial la inspirada en la tragedia homónima de Sófocles, Fedra.

Tragedia moderna

La tragedia moderna reapareció en la época del Renacimiento y por traducciones o imitaciones de la antigüedad. Cierto que se encuentran algunos ensayos en lengua vulgar, sobre todo, en Grecia, desde los siglo XIII al XVI pero es indudable que la primera tragedia regular es Sofonisba, compuesta por Gian Giorgio Trissino3​ y representada en Roma en 1515. En 1552, el poeta Jodelle, el primero en Francia, hizo representar la tragedia de su invención Cleopatra cautivaRobert Garnier4​ (1544-1590), Alexandre Hardy5​ y Jean Mairet siguieron su ejemplo hasta que en 1635 apareció Corneille, con su primera tragedia, Medea,6​ siguiéndole después Racine que elevó a la perfección el restaurado género. Entre los autores modernos que más se han distinguido en la tragedia hay que citar: