EL OTRO GRAN DAVID

La figura escultórica de DAVID  esta asociada indefectiblemente  a MIGUEL ÁNGEL. La majestuosidad, la belleza y perfección de esta obra puede eclipsar en gran parte cualquier otra, por ello la composición homónima de GIAN LORENZO BERDINI( El mejor escultor que dio el BARROCO), suele quedar en segundo plano, pero de un modo distinto resulta igualmente inconmensurable.
 La comparativa inicial sirve para mostrar la evolución artística del RENACIMIENTO y BARROCO escultóricos, el paso de la potencia al acto. El DAVID de MIGUEL ÁNGEL detalla la armonía, serenidad y contención de la escultura del Florentino, donde solo podemos captar lo que va a suceder si damos vuelta la figura y vemos la piedra que esconde en su mano, marcándose sus venas por el peso y la tensión, así como la intensa mirada donde rezuma la "terribilitá miguelangelesca"

Sin embargo, ahora, el escultor Italiano da un paso. La figura es movimiento en si, Se contorsiona su cuerpo. Una pierna se sustenta firmemente en el suelo y con la otra efectúa el giro de cadera, el mismo dinamismo aprecia ve en el rostro, mirando fijamente a GOLLIAT, apretando los labios y frunciendo el ceño        ( BERNINI horada el mármol para dar efectos de luz y sombra al rostro, trabaja el cabello , excava la pupila para imprimir mayor realismo.

La escultura de MIGUEL ÁNGEL evoca la imagen de un Dios, como las que podría albergar un templo Griego. o de un héroe mitológico, como los que le rodean en la Piazza della Signora, junto a Hércules o Perséo.

En BERNINI se ve a un muchacho. DAVID, un simple pastor que se enfrenta a un coloso. Tal vez no un gigante, pero si un guerrero enorme, fuerte y temible. Sabe que es imposible vencerlo cuerpo a cuerpo o con una espada que ni siquiera sabe manejar, solo tiene una oportunidad: abatirle de una pedrada con su honda. Por ello pone toda su concentración, que se marca en su rostro así como en la tensión de sus músculos. Le va la vida en ello.

Todo esto se condensa en su DAVID, la perfección técnica y anatómica, la expresividad, un nuevo concepto de crear y la captación de un tema bíblico en una instantánea puramente real y humana.

 " Escoged a un hombre y que venga contra mi. Si pudiere pelear conmigo y vencerme, nosotros seremos vuestros siervos; mas si yo prevaleciera sobre el y lo matare, vosotros seréis nuestros esclavos"

Apareció de entre la multitud un pequeño muchacho, un pastor llamado DAVID. Aquel muchacho metió la mano en el zurrón, saco una piedra, la puso en la honda y disparó. El gigante cayo fulminado en el suelo con el tremendo impacto de la piedra en medio de la frente. Corriendo DAVID se acerco a el, cogió su espada y decapito al gigante GOLIATH.

DIFERENCIAS DEL DAVID MIGUEL ANGEL Y EL DAVID DE BERNINI

Entre ambas obras dista poco mas de 100 años. MIGUEL ANGEL BUONAROTTI terminó su escultura en 1501 y GIAN LORENZO BERNINI lo hizo en 1623. Ambas pertenecen a periodos distintos de la Historia del Arte.

MIGUEL ANGEL pertenece al RENACIMIENTO, una época que retoma elementos de la cultura clásica, su David podría recordarnos al HERMES de PRAXISTELES, en su tratamiento de formas. Otras de las características generales del renacimiento es la concepción matemática de la naturaleza. Miguel Ángel realiza la obra siguiendo las series de Fibonacci conocida por proporción áurea o divina: la belleza ideal.

LORENZO BERNINI, por otro lado, pertenece al BARROCO. El Virtuosismo y el realismo fueron tratados con mucho interés en esta época.El BARROCO representa movimiento, la obra ya no representa solo un instante, la obra conmueve y pone ante el espectador una secuencia de situaciones.

La representación de BERNINI no es únicamente una instantánea de DAVID victorioso, relajado después de haber derrotado a GOLIAT en una posición triunfal como en el Miguel Ángel. No, Bernini es capaz de mostrarnos momentos diferentes con una única obra:El momento anterior al lanzamiento cuando David prepara la honda y la piedra. Con la tensión de todos los músculos de sus brazos, piernas, la rabia que hay en su rostro y la posición forzada de todo su cuerpo sabemos perfectamente la fuerza y velocidad con la que va a lanzar la piedra. Pero también sabemos que el lanzamiento va ha ser certero y rotundo.
No podemos ver que sucede pero lo damos por vencedor.
Vemos la victoria antes de que se produzca el lanzamiento

GIAN LORENZO BERNINI