miércoles, 24 de junio de 2020

EL SENDERO Y LA MONTAÑA





 SOY SENDERISTA Y NO ALPINISTA, porque el senderista puede recorrer el mundo sin fin, y el alpinista solo hace cumbre"

Estos días de soledad en casa, durante cuatro amenazantes días de tormenta en el valle, pero lo poco que queda de mi alegría mediterránea, hace de parapeto para no causar dolencia.
Saben los que me conocen, que no me gusta echar la vista atrás  ni para ver cuanta distancia me queda para dimensionar el camino recorrido, se que el sentimiento de amor hacia mi, esta anemico, pero de nuevo vuelvo a acelerar mi ritmo vital.
Estoy viviendo frente a un espejo, lo único que mi reflejo va retardado, estoy viendo lo que fui hace unos años, y me preocupa que venga con cobrador, ya que como repetía mi amigo Español que tuve -"Sabes, en esta vida se paga todo, hasta la risa"- ¿ Que razón le llevaba, a un recuerdo para decirme esta frase continuamente? con su acento tan peculiar. Lo único que me planteo es si los cambios que surjan en este reflejo, servirán para algo, a mi me intentaron aconsejar, cambiar de cierto modo, antes mis ganas de comerme mi vida, priorizando experiencias efímeras y noches de seda, que tan solo fueron humo. Ahora que soy yo el que esta limpiando el solar en donde construiré un solido pilar emocional, de vez en cuando palabras mas altas que otras, se convierten en viento que hace que mi solar se llene de arenilla, insignificante para una obra de tales dimensiones, pero no me gustaría que ningún poro quedase en los cimientos.
Me vuelven a tachar de loco algunas personas,y esta vez debo darles la razón  estoy,  pero en esta ocasión por amor, quizás este sea como la ilusión que tantas veces me ha machacado ocasionando daños colaterales, puede ser,  tras fracasar y tragar algo de barro, aun estoy convencido de que la ilusión en la mayoría de las veces no sabemos como utilizarla, es un buen combustible para avanzar en un proyecto, pero si llenamos en exceso el deposito forzaremos el motor.
La verdad es que siempre he tenido un objetivo en la creatividad de mi vida, pero nunca me he propuesto un fin, siempre tuve la idea que si tenia un fin o una meta cuando lo consiguiera ya se había acabado todo, por eso soy SENDERISTA y no ALPINISTA, porque el senderista puede recorrer el mundo sin fin y el alpinista solo hace cumbre, son diferentes visiones de la vida, ni mejores,ni peores.
Por eso siempre he conseguido mis objetos, pero una vez en mi poder, no he sabido dirigirlos ni conducirlos hasta el fin, y cuando hablo de fin no hablo de finalizar, si no de la misión de ese objeto. Conversando con una persona que me conoce demasiado, quizás la única que me conoce, me decía que yo nunca cambiaría y que siempre miraría el objeto, pero al desplegar este comentario, vi que la gente te conoce hasta donde te puede apreciar, ya que mi vida esta cambiando, y por una vez, es a causa de mi intención  estoy descubriendo la intencionalidad y el equilibrio.
También descubro que las metas se pueden alcanzar con intención  de casualidad, por tozudez o por amor.















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