lunes, 24 de junio de 2019

EL NARCISISMO GRIEGO






Hacia ya tiempo que el dios del río  SISIFO, se había fijado en la encantadora ninfa LIRIOPE. Siendo como era un dios, consiguio su deseo y LIRIOPE acabo concibiendo. El día marcado por el destino, dio a luz un muchacho y,  como sentía curiosidad por saber lo que le reservaba el destino, fue a preguntar al vidente ciego TIRESIAS cual seria el destino de su hijo. "Vivirá muchos años" dijo el sabio. "pero hay de el si mira su propio reflejo, pues sera su perdición , Su madre hizo que se retirasen todos los espejos y creció así sano y fuerte, y mas hermoso que ningún otro, Tan a menudo le decían cuan hermoso era que empezó a creer que su belleza era fuera de lo común  Muchos fueron loa que se enamoraron del hermoso muchacho, incluso de niño sus ayas caían rendidas a sus píes y, cuando tenia dieciséis años, todas las mujeres de la ciudad suspiraban por el, pero el creía que ninguna era suficientemente buena para el,.Un día  su vecina AMINIAS, no pudo aguantas mas, y confeso a NARCISO cuanto lo deseaba y le pidió que fuese su amante. NARCISO no contesto sino que con un sirviente, le envió una daga como repuesta. AMINIAS entendió el "regalo" y con esa daga puso fin a su vida, pidiendo a los dioses que su ira cayese sobre NARCISO, a quien le echo la maldición de que en el amor recibiera el mismo desdén con que había tratado a los demás   ECO era una ninfa de una montaña que una vez ayudo a ZEUS distrayendo a HERA charlando de temas intrascendentes cuando esta se acercaba al lugar donde el dios del trueno estaba formulando sus votos matrimoniales. La treta de ECO daba tiempo a los invitados de ZEUS para que pudieran abandonar el lugar. Pero cuando HERA la descubrió  estallo airada:"¡Que esa lengua maléfica permanezca silenciosa de ahora en adelante! Permanecerás en silencio  y solo hablaras cuando te hablen, y hablaras como mucho con sonidos cortos!". Y así  cuando ECO dio con NARCISO una mañana, justo cuando el joven estaba luchando con un ciervo al que acababa de capturar en sus redes, solo pudo mirarle, y no hablar. Y asi solo miro. Por sus venas corría el deseo,. Aun cuando deseaba con todas sus fuerzas seducir al hermoso joven con sus dulces palabras, solo pudo mover sus labios en vano. NARCISO noto que le miraba. "¿Quien eres?" grito. "Eres" respondió ECO, que solo acertaba a repetir lo que le decían  " Déjame verte" dijo el muchacho. "Verte", dijo ECO.Intrigado, NARCISO grito: ¿ Como te llamas?. "Llamas" contesto la ninfa. Y, incapaz de contener su deseo, salio de su escondrijo y se arrojo, ardiente y jadeante. sobre el hermoso joven  quien, como ya estaba algo acostumbrado a estos comportamientos, se rehízo y se libero rápidamente de su abrazo, perdiéndose en lo mas profundo del bosque, dejando sus redes tras el, ECO le siguió  intentando llamarle para disipar sus miedos, pero no pudo producir sonido alguno. El muchacho desapareció rápidamente de su vista. Durante semanas, la ninfa erro por el bosque en búsqueda de su amado, sin comer y sin apenas dormir. Pronto se puso tan delgada que de ella nada quedo que se pudiese ver con los ojos. Aun hoy en día erra por las montañas del mundo y sigue buscando a NARCISO. Su hogar son las quebradas mas pedregosas y los valles mas profundos. Puedes llamarla a gritos y, si esta,te contestara, pero solo con las mismas palabras que le hayas dicho. Por decreto de HERA, no puede hacer otra cosa. Una tarde, un mes después de haber huido de ECO, en un bosque apartado en lo alto del monte HELICON, NARCISO cayo de rodillas, cansado de cazar y de ser cazado. Frente a el, corría un manantial de aguas claras y profundas, cuya superficie, gracias a la luz recibida a través de las copas de los arboles, era un espejo perfecto. NARCISO había visto muchas veces su propia sombra, pero jamas había visto su reflejo. Así  cuando a cuatro patas, se inclino hacia delante y miro en el manantial, quedo asombrado por la imagen de insuperable belleza que le miraba. No había visto jamas una cara como la que estaba escrutando. Por  primera vez en su vida, se enamoro.
Inclino hacia abajo su cara para besar y abrazar al joven del manantial. Pero sus labios y sus brazos solo hallaron agua. Aunque se retiro rápidamente  el reflejo se vio alterado por un momento por las ondas del agua. Creyendo que su amado había huido de el como el mismo había hecho en otras ocasiones  NARCISO empezó a llorar. Pero, a medida que las ondas se iban desvaneciendo, la hermosa cara apareció de nuevo." No me abandones, hermoso amigo", rogó "¡Quédate, amor mio!". Nuevamente se inclino NARCISO para tocar el cuerpo que había en el agua, pero la imagen se volvió una vez mas borrosa cuando su mano hendió la superficie. Seguro como estaba ahora de que acababa de perder a su verdadero amor, se tiro el pelo y araño su garganta. Cuando se calmo y las aguas se aclararon, una vez mas, apareció la cara de su amado, ahora herida y desencajada. Se sintió aterrado y lloro. Cuando el carro de Helios acabo su recorrido por el cielo, una noche gris cubrió el bosque, pero NARCISO no se movió  No tenia ojos mas que para el esquivo joven del manantial. Las primeras luces del día le sorprendieron mirando intensamente en las profundidades del agua. La cara que apareció poco a poco, era demacrada y ausente. Desplazo su mano al agua para acariciar esa mejilla, ahora tan preciada, y surgieron nuevamente sus frustraciones del día anterior. " Te quiero, te quiero" grito mil veces al manantial. La cara, igual que la de ECO, movió sus labios pero no emitió sonido alguno. Incapaz de dejar la orilla del manantial, NARCISO llego a morir en ese lugar que no deseaba abandonar, mientras su cara, antes hermosa, se volvía desencajada y grotesca. Las ninfas de las montañas le encontraron y le habrían enterrado pero, cuando preparaban el funeral, su cuerpo se desvaneció y, donde yacía  se abrió una flor de pétalos dorados con delicados
matices blancos.



EL NARCISISMO GRIEGO





Hacia ya tiempo que el dios del río  SISIFO, se había fijado en la encantadora ninfa LIRIOPE. Siendo como era un dios, consiguio su deseo y LIRIOPE acabo concibiendo. El día marcado por el destino, dio a luz un muchacho y,  como sentía curiosidad por saber lo que le reservaba el destino, fue a preguntar al vidente ciego TIRESIAS cual seria el destino de su hijo. "Vivirá muchos años" dijo el sabio. "pero hay de el si mira su propio reflejo, pues sera su perdición , Su madre hizo que se retirasen todos los espejos y creció así sano y fuerte, y mas hermoso que ningún otro, Tan a menudo le decían cuan hermoso era que empezó a creer que su belleza era fuera de lo común  Muchos fueron loa que se enamoraron del hermoso muchacho, incluso de niño sus ayas caían rendidas a sus píes y, cuando tenia dieciséis años, todas las mujeres de la ciudad suspiraban por el, pero el creía que ninguna era suficientemente buena para el,.Un día  su vecina AMINIAS, no pudo aguantas mas, y confeso a NARCISO cuanto lo deseaba y le pidió que fuese su amante. NARCISO no contesto sino que con un sirviente, le envió una daga como repuesta. AMINIAS entendió el "regalo" y con esa daga puso fin a su vida, pidiendo a los dioses que su ira cayese sobre NARCISO, a quien le echo la maldición de que en el amor recibiera el mismo desdén con que había tratado a los demás   ECO era una ninfa de una montaña que una vez ayudo a ZEUS distrayendo a HERA charlando de temas intrascendentes cuando esta se acercaba al lugar donde el dios del trueno estaba formulando sus votos matrimoniales. La treta de ECO daba tiempo a los invitados de ZEUS para que pudieran abandonar el lugar. Pero cuando HERA la descubrió  estallo airada:"¡Que esa lengua maléfica permanezca silenciosa de ahora en adelante! Permanecerás en silencio  y solo hablaras cuando te hablen, y hablaras como mucho con sonidos cortos!". Y así  cuando ECO dio con NARCISO una mañana, justo cuando el joven estaba luchando con un ciervo al que acababa de capturar en sus redes, solo pudo mirarle, y no hablar. Y asi solo miro. Por sus venas corría el deseo,. Aun cuando deseaba con todas sus fuerzas seducir al hermoso joven con sus dulces palabras, solo pudo mover sus labios en vano. NARCISO noto que le miraba. "¿Quien eres?" grito. "Eres" respondió ECO, que solo acertaba a repetir lo que le decían  " Déjame verte" dijo el muchacho. "Verte", dijo ECO.Intrigado, NARCISO grito: ¿ Como te llamas?. "Llamas" contesto la ninfa. Y, incapaz de contener su deseo, salio de su escondrijo y se arrojo, ardiente y jadeante. sobre el hermoso joven  quien, como ya estaba algo acostumbrado a estos comportamientos, se rehízo y se libero rápidamente de su abrazo, perdiéndose en lo mas profundo del bosque, dejando sus redes tras el, ECO le siguió  intentando llamarle para disipar sus miedos, pero no pudo producir sonido alguno. El muchacho desapareció rápidamente de su vista. Durante semanas, la ninfa erro por el bosque en búsqueda de su amado, sin comer y sin apenas dormir. Pronto se puso tan delgada que de ella nada quedo que se pudiese ver con los ojos. Aun hoy en día erra por las montañas del mundo y sigue buscando a NARCISO. Su hogar son las quebradas mas pedregosas y los valles mas profundos. Puedes llamarla a gritos y, si esta,te contestara, pero solo con las mismas palabras que le hayas dicho. Por decreto de HERA, no puede hacer otra cosa. Una tarde, un mes después de haber huido de ECO, en un bosque apartado en lo alto del monte HELICON, NARCISO cayo de rodillas, cansado de cazar y de ser cazado. Frente a el, corría un manantial de aguas claras y profundas, cuya superficie, gracias a la luz recibida a través de las copas de los arboles, era un espejo perfecto. NARCISO había visto muchas veces su propia sombra, pero jamas había visto su reflejo. Así  cuando a cuatro patas, se inclino hacia delante y miro en el manantial, quedo asombrado por la imagen de insuperable belleza que le miraba. No había visto jamas una cara como la que estaba escrutando. Por  primera vez en su vida, se enamoro.
Inclino hacia abajo su cara para besar y abrazar al joven del manantial. Pero sus labios y sus brazos solo hallaron agua. Aunque se retiro rápidamente  el reflejo se vio alterado por un momento por las ondas del agua. Creyendo que su amado había huido de el como el mismo había hecho en otras ocasiones  NARCISO empezó a llorar. Pero, a medida que las ondas se iban desvaneciendo, la hermosa cara apareció de nuevo." No me abandones, hermoso amigo", rogó "¡Quédate, amor mio!". Nuevamente se inclino NARCISO para tocar el cuerpo que había en el agua, pero la imagen se volvió una vez mas borrosa cuando su mano hendió la superficie. Seguro como estaba ahora de que acababa de perder a su verdadero amor, se tiro el pelo y araño su garganta. Cuando se calmo y las aguas se aclararon, una vez mas, apareció la cara de su amado, ahora herida y desencajada. Se sintió aterrado y lloro. Cuando el carro de Helios acabo su recorrido por el cielo, una noche gris cubrió el bosque, pero NARCISO no se movió  No tenia ojos mas que para el esquivo joven del manantial. Las primeras luces del día le sorprendieron mirando intensamente en las profundidades del agua. La cara que apareció poco a poco, era demacrada y ausente. Desplazo su mano al agua para acariciar esa mejilla, ahora tan preciada, y surgieron nuevamente sus frustraciones del día anterior. " Te quiero, te quiero" grito mil veces al manantial. La cara, igual que la de ECO, movió sus labios pero no emitió sonido alguno. Incapaz de dejar la orilla del manantial, NARCISO llego a morir en ese lugar que no deseaba abandonar, mientras su cara, antes hermosa, se volvía desencajada y grotesca. Las ninfas de las montañas le encontraron y le habrían enterrado pero, cuando preparaban el funeral, su cuerpo se desvaneció y, donde yacía  se abrió una flor de pétalos dorados con delicados
matices blancos.

















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